Siempre digo que no me gusta hacer planes a largo plazo porque nunca se sabe lo que te puede sorprender y casi siempre te acabas sorprendiendo. Ahora mismo yo debería estar de vuelta en España pero al final lo que iban a ser 3 meses se convierten en 6, se alarga la experiencia hasta diciembre, y yo encantada! Vine aquí sin saber exactamente lo que me encontraría, con la mente lo mas abierta posible e intente prepararme para todo pero aun así me he visto en situaciones que nunca me habría imaginado y alguna vez he tenido que respirar hondo para ser consciente de lo que estoy viviendo.
Me gusta saber que aun me quedan 3 meses mas para seguir poniendo mi granito de arena y a la vez aprender de lo que veo y de toda la gente que voy conociendo, sobre la gente de aquí hablaré en otra ocasión que merece un capitulo aparte, pero por aquí han pasado también muchos voluntarios, y con mas de uno me he quedado embobada escuchando sus experiencias. He intentado quedarme con un poquito de cada uno de ellos, desde la doctora Aurora hasta Sara, mi actual compañera en el “chiringuito” de curas, donde cada día curamos las heridas a una legión de niños que entran muy seguros y con una sonrisa para luego echar algún que otro lagrimón.
Ahora lo que toca es seguir con el trabajo que estos meses prometen ser intensos así que a coger fuerzas que aquí no se para!
Laura, voluntaria
Me gusta saber que aun me quedan 3 meses mas para seguir poniendo mi granito de arena y a la vez aprender de lo que veo y de toda la gente que voy conociendo, sobre la gente de aquí hablaré en otra ocasión que merece un capitulo aparte, pero por aquí han pasado también muchos voluntarios, y con mas de uno me he quedado embobada escuchando sus experiencias. He intentado quedarme con un poquito de cada uno de ellos, desde la doctora Aurora hasta Sara, mi actual compañera en el “chiringuito” de curas, donde cada día curamos las heridas a una legión de niños que entran muy seguros y con una sonrisa para luego echar algún que otro lagrimón.
Ahora lo que toca es seguir con el trabajo que estos meses prometen ser intensos así que a coger fuerzas que aquí no se para!
Laura, voluntaria
Laura Rivero
Están siendo tiempos difíciles en guinea bissau, y Casa Emanuel es un buen reflejo de ello. En pocas semanas han llegado muchos bebés y recién nacidos desnutridos, porque en la mayoría de los casos la mamá murió en el parto y no hay quien los pueda alimentar. en los momentos de toma de biberones, cuando se termina con el último es ya casi hora de volver a empezar por el primero. los bibes de leche y los pañales vuelan, hay mucho ajetreo, y son escasos los ratos de silencio (encima hace un calorazo y una humedad impresionantes, así que cuesta mucho ponerlos a dormir).
A veces, mientras estoy con los niños de Casa Emanuel, pienso en qué hubiera sido de todos ellos si no hubiera existido este hogar….
Núria Puech
A veces, mientras estoy con los niños de Casa Emanuel, pienso en qué hubiera sido de todos ellos si no hubiera existido este hogar….
Núria Puech
Núria Puech
Esto es espectacular, creo que están haciendo un trabajo increíble con estos niños. Es increíble ver sus sonrisas cada día y poder contribuir un poco. Casa Emanuel se espectacular de verdad, comparado con el que se ve aquí afuera, esto es un hotel de cinco estrellas.
Los niños son guapísimos, ya desde el primer día que llegué me recibieron con una sonrisa de oreja a oreja, y cada día se les coge más cariño. Con sólo que pases cinco minutos al día con ellos, los sirve y lo agradecen muchísimo. Otra cosa que me ha sorprendido mucho es los valores humanos que tienen, lo dan todo por todos, todos son hermanos y aunque se pelean, como todos los hermanos, se quieren con locura.
La experiencia, creo que es lo mejor que he vivido y he hecho en mi vida, de hecho, ya estoy pensando en cuando podré volver y ¡todavía no he marchado!
En en cuanto a mi trabajo aquí, se básicamente estar con los niños, ellos tienen mucha gente trabajando dentro de casa Emanuel, pero necesitan ese cariño que, por el mucho trabajo que hay aquí, les es imposible dar al resto de trabajadores. Yo me dedico a estar con ellos y a sacarles de tanto en cuánto de la casa para que puedan ver un poco como están las cosas afuera. Cada día salimos a pasear con un grupito diferente y el otro día, por ejemplo, fuimos ir a los “autos de choque” con la mitad de los que habían pasado de curso, para celebrar sus buenas notas. El próximo sábado iremos con el resto de niños.
Esta semana además tenemos pendiente a ver si pueden salir a la playa, puesto que ellos casi nunca salen, pues ni siquiera pueden salir solos de aquí y sobre todo a las niñas, porque se muy peligroso. Además tengo que decir que estos niños han tenido una suerte inmensa, puesto que si comparas como viven en casa Emanuel, con los niños que hay afuera, no te puedes hacer una idea. De hecho, estar en casa Emanuel, es como no estar en Guinea Bissau, es completamente diferente.
¡¡¡Muchas gracias por darme la oportunidad de estar aquí!!!
Rosa
Los niños son guapísimos, ya desde el primer día que llegué me recibieron con una sonrisa de oreja a oreja, y cada día se les coge más cariño. Con sólo que pases cinco minutos al día con ellos, los sirve y lo agradecen muchísimo. Otra cosa que me ha sorprendido mucho es los valores humanos que tienen, lo dan todo por todos, todos son hermanos y aunque se pelean, como todos los hermanos, se quieren con locura.
La experiencia, creo que es lo mejor que he vivido y he hecho en mi vida, de hecho, ya estoy pensando en cuando podré volver y ¡todavía no he marchado!
En en cuanto a mi trabajo aquí, se básicamente estar con los niños, ellos tienen mucha gente trabajando dentro de casa Emanuel, pero necesitan ese cariño que, por el mucho trabajo que hay aquí, les es imposible dar al resto de trabajadores. Yo me dedico a estar con ellos y a sacarles de tanto en cuánto de la casa para que puedan ver un poco como están las cosas afuera. Cada día salimos a pasear con un grupito diferente y el otro día, por ejemplo, fuimos ir a los “autos de choque” con la mitad de los que habían pasado de curso, para celebrar sus buenas notas. El próximo sábado iremos con el resto de niños.
Esta semana además tenemos pendiente a ver si pueden salir a la playa, puesto que ellos casi nunca salen, pues ni siquiera pueden salir solos de aquí y sobre todo a las niñas, porque se muy peligroso. Además tengo que decir que estos niños han tenido una suerte inmensa, puesto que si comparas como viven en casa Emanuel, con los niños que hay afuera, no te puedes hacer una idea. De hecho, estar en casa Emanuel, es como no estar en Guinea Bissau, es completamente diferente.
¡¡¡Muchas gracias por darme la oportunidad de estar aquí!!!
Rosa
Rosa De Antonio
Ya hace casi un mes y medio que llegué como voluntaria a Casa Emanuel, y después de todas estas semanas, creo que ya tengo unas cuantas experiencias para compartir con todos vosotros, así que; me estreno como bloguera voluntaria.
Soy enfermera y mis expectativas eran el venir aquí, a Guinea Bissau y trabajar mucho en el hospital. Bien, por suerte y gracias al esfuerzo de numerosos voluntarios, misioneros y trabajadores locales, que durante todos este tiempo han realizado un trabajo excelente, el trabajo físico con el que yo me esperaba encontrar está muy bien solventado por enfermeros como; Ismael, Fernando, Matilde, Víctor o Fonseca. Pero de todas formas, aquí siempre hay trab
ajo que hacer, así que a los poquitos días de mi llegada, Juan me puso a cargo de un grupo de 14 estudiantes de tercer curso de enfermería, que venían a hacer un periodo de prácticas de un mes!!! Un reto totalmente nuevo para mí, que sinceramente, al principio me asustó un poquito……por el tema del idioma!!!
Los primeros días mi comunicación con los estudiantes era a través de alguno de los enfermeros que estuvieran trabajando, pero poco a poco, gracias al interés por parte de los estudiantes, me pude “independizar” y empezar a llevar a cabo tareas de tipo formativo. Se trataba de un grupo de estudiantes con muchas ganas de aprender y también con mucho qué aprender, así que me puse manos a la obra y con la ayuda de Juan y de Núria, empecé a realizar seminarios o talleres diarios a cada turno; mañana y tarde, y cada día de un tema diferente. Les he enseñado a realizar cálculos de dosis farmacológicas pediátricas, el contaje de gotas/minuto, les he dado clases teóricas sobre el Proceso de Atención de Enfermería, consiguiendo incluso que realizaran un PAE con un paciente!!!También les hablé de numerosos temas como; el paciente diabético, al valoración del recién nacido, la hipertensión arterial o un poco de farmacología general. También recibieron una charla de Mafalda; una voluntaria portuguesa, que les habló de los cuidados dentales en pediatría y otra charla de Núria sobre la valoración neurológica de un niño.
En fin, que el mes se pasó volando y la experiencia de poder enseñar cosas básicas de enfermería, ha sido super positiva y enriquecedora. Tengo que decir que ha tenido mucho que ver las ganas, ilusión, interés y empeño que pusieron todos los alumnos. Deduzco que a ellos también les gustó la experiencia y le supieron sacar provecho, ya que incluso algunos de ellos pidieron poder venir unos días más!!!!!
Sara Samblas
Soy enfermera y mis expectativas eran el venir aquí, a Guinea Bissau y trabajar mucho en el hospital. Bien, por suerte y gracias al esfuerzo de numerosos voluntarios, misioneros y trabajadores locales, que durante todos este tiempo han realizado un trabajo excelente, el trabajo físico con el que yo me esperaba encontrar está muy bien solventado por enfermeros como; Ismael, Fernando, Matilde, Víctor o Fonseca. Pero de todas formas, aquí siempre hay trab
ajo que hacer, así que a los poquitos días de mi llegada, Juan me puso a cargo de un grupo de 14 estudiantes de tercer curso de enfermería, que venían a hacer un periodo de prácticas de un mes!!! Un reto totalmente nuevo para mí, que sinceramente, al principio me asustó un poquito……por el tema del idioma!!!
Los primeros días mi comunicación con los estudiantes era a través de alguno de los enfermeros que estuvieran trabajando, pero poco a poco, gracias al interés por parte de los estudiantes, me pude “independizar” y empezar a llevar a cabo tareas de tipo formativo. Se trataba de un grupo de estudiantes con muchas ganas de aprender y también con mucho qué aprender, así que me puse manos a la obra y con la ayuda de Juan y de Núria, empecé a realizar seminarios o talleres diarios a cada turno; mañana y tarde, y cada día de un tema diferente. Les he enseñado a realizar cálculos de dosis farmacológicas pediátricas, el contaje de gotas/minuto, les he dado clases teóricas sobre el Proceso de Atención de Enfermería, consiguiendo incluso que realizaran un PAE con un paciente!!!También les hablé de numerosos temas como; el paciente diabético, al valoración del recién nacido, la hipertensión arterial o un poco de farmacología general. También recibieron una charla de Mafalda; una voluntaria portuguesa, que les habló de los cuidados dentales en pediatría y otra charla de Núria sobre la valoración neurológica de un niño.
En fin, que el mes se pasó volando y la experiencia de poder enseñar cosas básicas de enfermería, ha sido super positiva y enriquecedora. Tengo que decir que ha tenido mucho que ver las ganas, ilusión, interés y empeño que pusieron todos los alumnos. Deduzco que a ellos también les gustó la experiencia y le supieron sacar provecho, ya que incluso algunos de ellos pidieron poder venir unos días más!!!!!
Sara Samblas
Sara Samblás